El siliconazo y las 4x4 en Codelco

Dos conocidas me han comentado que algunas mujeres que trabajan en Codelco y que recibieron un bono de término de conflicto por dos años de cerca de 9 millones de pesos, están haciéndose cirugías estéticas, principalmente liposucciones y aumentando sus pechos con silicona.

Por otra parte algunos vendedores de automotoras comentan que vendieron hasta 15 vehiculos por día; es decir, lograron en una jornada su meta de todo un año. En algunos modelos se acabaron los stocks. Las preferencias: 4 x 4. Lo mismo está ocurriendo con los televisores plasmas en el mercado local: también llevan curso de agotarse.

Otra realidad muy distinta al siliconazo y el 4x4 la representa el bono de cerca de 450.000 pesos que recibieron los trabajadores subcontratistas de Codelco. Para ellos esta cantidad sirve para pagar deudas y nada más.

La convivencia en Rancagua se torna insostenible fruto de estas dos realidades tan dispares; entre dos clases de trabajadores, que desempeñan a veces funciones similares pero ganan sueldos muy distintos. Y la tensión se ha crecentado aún más con el proceso de judicialización que ha inicado Codelco desde la publicación del Informe de la Dirección del Trabajo. Sin embargo cuando dos instituciones discrepan es la justicia quien dirime, es este el casi. Aquí la realidad no es grata; incluso al interior de algunas familias conviven trabajadores con igual trabajo, que, sin embargo, reciben remuneraciones distintas.

Este es un problema de justicia laboral, de desigualdad salarial que no dá para más.¿este es el Chile que queremos? Yo no. Tiene que haber más diálogo social conducido a la igualdad salarial si hay igualdad de trabajo.